Entrevista, parte 3: Aunque Sebastián asegura que no recibiría menos de 25 mil quetzales, reconoce que ha matado por encargo sin cobrar. Lo hizo por una señora que era víctima de violencia intrafamiliar. "Ella me contó que su esposo la golpeaba, así que entré a su casa y lo maté. Esas cosas no las soporto", dice sin remordimiento.